Tuesday, January 31, 2006

A Mi Padre

Hemos venido a despedir a un hombre que llevo una vida extraordinaria, no puedo, ni debo pasar esta ocasión para rendirle un pequeño tributo. Todos deben saber de la gran vida que llevo, es una deuda que tengo con él, una deuda que tenemos todos los que lo conocimos, por que solo nosotros sabemos de las extraordinarias cosas que nos hizo ver y vivir.

Pocos sabemos de la enorme alegría que mi padre tenia hasta poco antes de morir, su disposición a sonreír y poner su mejor cara cuando [...] rodeaba[mos] su cama en el hospital, de su fortaleza y entereza como hombre, y de su enorme determinación para aferrarse a la vida y no caer, de sus ganas de luchar y de la enorme esperanza que siempre tuvo en su corazón, de sus palabras siempre justas, siempre ecuánimes.

Pocos sabemos que detrás de esa sonrisa y de esa mirada tierna, se escondía un hombre, [...] el hombre que sufrió lo inimaginable, el hombre que murió lentamente, pero muy dignamente, el hombre cuya agonía a marcado nuestras vidas y nos ha mostrado el rostro del dolor silencioso y del amor incondicional, ese amor que es capaz de pensar en los demás antes que en nosotros mismos, así fue mi padre;

Ojala y todo lo que hayamos hecho por él, haya compensado este sacrificio, si no, habremos de pagar con lagrimas y dolor, el precio de su ausencia y de los enormes vacíos que dejo en nuestras vidas. Donde estés PAPA sé que, como siempre, [pensaras] en nosotros antes que en nada, sé que desde hoy tenemos un angelito mas que habrá de [velar] nuestros sueños, como nosotros cuidamos los tuyos, y sé (y lo sé muy bien), que has de estar al lado de nuestro señor, guiando nuestros pasos y sosteniendo nuestros brazos para cumplir a cabalidad, con la enorme misión y la difícil tarea de superarte en el amor que nos diste, espero que al final de mis días te sientas orgulloso, como hoy me siento yo de ti.

Quiero terminar con dos reflexiones, una que escuche hace mucho, mucho tiempo, y que dice:
Hay personas a las que "no hay que llorar por haberlas perdido, sino agradecer infinitamente el regalo de Dios de haberlas conocido"

La segunda es más consoladora para mi y mi familia:

Una mujer enferma de cáncer terminal, que estaba a punto de terminar en esta vida, solo pidió un deseo: Ser enterrada con un tenedor. Por que un tenedor? Se preguntaron muchos. "Porque después de esto viene lo mejor y en toda fiesta lo mejor es el postre"Y yo voy precisamente a disfrutar de lo mejor de la vida, que es la vida eterna que solo Dios nuestro señor nos da. Sé que tu PAPA estas disfrutando tu postre, solo te tengo una ultima petición, que guardes para mi un pedacito para el día en que juntos disfrutemos la alegría eterna de nuestro reencuentro.

Hasta ese día PAPA te recordare y te llevare en mi corazón.

Redactado por The OC

1 comment:

Anonymous said...

Lo siento mucho, OC. Sé que todas las palabras y frases por decir pueden sonar huecas, carentes de significado para alguien quien ni siquiera conoció a tu papá, pero al menos tuve una pequeña probada por algunas semanas del martirio que estaba pasando, y supe parte de lo que hicieron, lo que le dedicaron y le entregaron en sus últimos días.

Como bien dices: hay que quedarse con todo lo bueno que aportó a ti y a tu familia, que en este caso es mucho.

Un abrazo solidario.