Esta semana el gobernador del estado dio un discurso que me a parecido el mas congruente y sensato que un político a pronunciado en ultimas fechas “la guerra es entre ellos y el papel del gobierno no es guerrear”, sino aplicar la ley, es decir, castigar a quien comete un delito" lo anterior en relación a la "guerra" contra el narcotrafico que se ha venido llevando a cabo en el estado, lamentablemente también creo que vivimos en un país en el que es muy difícil, sino imposible pasar de las palabras a los hechos.
También esta semana estuve presente en un foro convocado para discutir el asunto de la militarización de la frontera, conmemorando además con este foro la matanza de Tlatelolco, pero que tiene que ver una cosa con la otra, siempre me he opuesto a la pseudo "guerra" que el Sr. Calderón, inicio contra el narcotrafico, ya en una ocación expuse el porque de mi rechazo, primero a la guerra y luego al uso de militares para realizar labores de seguridad publica, pero lo que escuche en este foro simplemente me dejo los sentimientos a flor de piel, mi primera reacción he de confesar fue de mucho miedo, después de paranoia, pero al final de reflexión, miedo porque los testimonios de personas que han sido SECUESTRADAS por el ejercito, no puede mas que provocarme nauseas; paranoia porque fue tal el impacto de esos testimonios y muchos mas de los que me he enterado, que no puedo ni siquiera mirar un convoy militar, sin sentir que me pueden parar, así no mas porque si; y finalmente de reflexión porque si algo me da mas miedo que eso, es el hecho que la sociedad no hacemos nada, miramos todas estas injusticias y simplemente seguimos con nuestras vidas como si nada pasara; Hay que denunciar, hay que hacerle saber al mundo del infierno en que han convertido a nuestra ciudad los militares, y lo digo así con todas sus letras, porque si bien el gobierno utiliza la frágil fachada del crimen organizado, hay estadísticas impresionantes y reales que apuntan nuestras sospechas hacia otro lado, mas 10000 autos robados; mas de 1000 muertos (muchos y cada vez mas de civiles, no muertos en fuego cruzado, porque curiosamente desde la aparición del ejercito, cesaron las balaceras, hoy casi no vemos ejecuciones, es cada vez mas común solo encontrar los muertos y entre esos muertos civiles repito, muertos en asaltos la mayoría); el incremento impresionante de los secuestros de todo tipo, a tal grado que el gobierno municipal no pudo mas que idear un botón de pánico , exclusivo además para los mas connotados empresarios de la localidad; todo curiosamente desde la llegada de los militares.
En esa reunión se nos sugirió denunciar, comunicar, que los juarenses estamos hartos de los levantones, de los retenes, de las redadas (tan impresionantes como la ultima donde se cateo una colonia entera), de las burlas y la total falta de respeto a los mas mínimos derechos humanos y constitucionales que como mexicanos merecemos, yo no quiero paz, quiero seguridad, porque la seguridad es mas un derecho mio y una obligación de quienes a los que les confié mi voto; exigo por este medio, un alto a las arbitrariedades del ejercito y alzo mi voz para que mas mexicanos, nos concientizemos del enorme, enorme riesgo y peligro en que el gobierno esta poniendo a nuestra frágil democracia.
También esta semana estuve presente en un foro convocado para discutir el asunto de la militarización de la frontera, conmemorando además con este foro la matanza de Tlatelolco, pero que tiene que ver una cosa con la otra, siempre me he opuesto a la pseudo "guerra" que el Sr. Calderón, inicio contra el narcotrafico, ya en una ocación expuse el porque de mi rechazo, primero a la guerra y luego al uso de militares para realizar labores de seguridad publica, pero lo que escuche en este foro simplemente me dejo los sentimientos a flor de piel, mi primera reacción he de confesar fue de mucho miedo, después de paranoia, pero al final de reflexión, miedo porque los testimonios de personas que han sido SECUESTRADAS por el ejercito, no puede mas que provocarme nauseas; paranoia porque fue tal el impacto de esos testimonios y muchos mas de los que me he enterado, que no puedo ni siquiera mirar un convoy militar, sin sentir que me pueden parar, así no mas porque si; y finalmente de reflexión porque si algo me da mas miedo que eso, es el hecho que la sociedad no hacemos nada, miramos todas estas injusticias y simplemente seguimos con nuestras vidas como si nada pasara; Hay que denunciar, hay que hacerle saber al mundo del infierno en que han convertido a nuestra ciudad los militares, y lo digo así con todas sus letras, porque si bien el gobierno utiliza la frágil fachada del crimen organizado, hay estadísticas impresionantes y reales que apuntan nuestras sospechas hacia otro lado, mas 10000 autos robados; mas de 1000 muertos (muchos y cada vez mas de civiles, no muertos en fuego cruzado, porque curiosamente desde la aparición del ejercito, cesaron las balaceras, hoy casi no vemos ejecuciones, es cada vez mas común solo encontrar los muertos y entre esos muertos civiles repito, muertos en asaltos la mayoría); el incremento impresionante de los secuestros de todo tipo, a tal grado que el gobierno municipal no pudo mas que idear un botón de pánico , exclusivo además para los mas connotados empresarios de la localidad; todo curiosamente desde la llegada de los militares.
En esa reunión se nos sugirió denunciar, comunicar, que los juarenses estamos hartos de los levantones, de los retenes, de las redadas (tan impresionantes como la ultima donde se cateo una colonia entera), de las burlas y la total falta de respeto a los mas mínimos derechos humanos y constitucionales que como mexicanos merecemos, yo no quiero paz, quiero seguridad, porque la seguridad es mas un derecho mio y una obligación de quienes a los que les confié mi voto; exigo por este medio, un alto a las arbitrariedades del ejercito y alzo mi voz para que mas mexicanos, nos concientizemos del enorme, enorme riesgo y peligro en que el gobierno esta poniendo a nuestra frágil democracia.
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